El Valle Sagrado de los Incas

Se llama así al extremo del extenso valle de Urubamba, entre los pueblos de Pisac y Ollantaytambo, ubicado a poca distancia de la ciudad de Cusco, donde se concentraron desde las zonas agrícolas incas y los hermosos pueblos.

El valle se caracteriza por condiciones muy especiales, como un excelente clima, tierras muy fértiles y las aguas del río sagrado de los Incas, Vilcanota (voz quechua, cosa sagrada o maravillosa), río arriba en la ciudad de Urubamba, cambia su nombre y se llama rio urubamba.

Es el área donde se puede apreciar y magnificar el alto desarrollo tecnológico que los incas lograron en la agricultura a través de sistemas de andenerías (conjunto de terrazas terrestres en forma escalonada en las montañas para ser utilizadas en la siembra) que hoy están en plena producción, acompañadas. Por sofisticados diseños y obras de ingeniería hidráulica que utilizamos para el riego. También son dignos de mención los centros de culto a la Pachamama (madre tierra).

Hoy en día, todas las ciudades del Valle Sagrado de los Incas tienen la fusión del estilo arquitectónico incaico y español. La riqueza de su gente en su folklore y artesanía, su estilo de vida, su ropa, lo convierten en un lugar que le dejará recuerdos inolvidables.

En esta área, se han establecido importantes hoteles que permiten disfrutar de la naturaleza andina de Cusco, un mejor clima y una menor altitud sobre el nivel del mar en relación con la ciudad de Cusco. Ver hoteles en el Valle Sagrado.

Turismo participativo: Culturas vivas:

En el área del Valle Sagrado, están surgiendo excelentes oportunidades para que los turistas lleven a cabo el turismo de una cultura viva, teniendo la posibilidad de alojarse en casas nativas y compartir con ellos sus costumbres, tradiciones y actividades diarias.

Si ingresa al Valle Sagrado a través del área de Písac, se recomienda visitar el Parque Temático Sudamericano de Camélidos Awana Kancha, ubicado en Taray, a 23 km de la ciudad de Cusco en el distrito de Taray. Exposición de camélidos como llamas, vicuñas y alpacas en su entorno natural y confección de tejidos con fibras extraídas de lana. Además, es posible observar algunas plataformas agrícolas del período Inca y especies de flora de la zona. En esta área, hay varios puntos de vista al borde de la carretera que ofrecen impresionantes vistas del Valle Sagrado.

Pisac

Pueblo pintoresco ubicado en las estribaciones de la colina Intihuatana (un lugar donde se amarra el sol), posee el mejor sistema de andenería logrado por los incas en todos los Andes.

Cerca del pueblo se encuentra el Parque Arqueológico de Pisac, sitios arqueológicos incas, edificios de piedra pulida finamente ensamblados, ciudadelas, torrecillas, fortalezas militares, observatorios astronómicos, etc. Destaca el cementerio inca, el más grande de toda América.

Todos los domingos se celebra la fiesta dominical, encabezada por los caciques o jefes de Ayllus que llevan su varáyoc y trajes típicos, bailes folklóricos y misa en quechua. También todos los domingos se celebra el “catu”, que es la feria nativa de intercambio de productos agrícolas en la que prevalece el trueque, la costumbre viva de un personaje puramente inca.

Todos los jueves y domingos, el “mercado inca” se lleva a cabo en la Plaza de Armas, la feria de artesanías, entre las que se encuentran hermosas artesanías textiles, suéteres, ponchos, bolsas, etc. Y artesanías de cerámica con reproducciones de piezas arqueológicas incas, keros (vasos ceremoniales). ), collares, etc. Artesanos y comerciantes indígenas de muchos pueblos acuden a esta feria para abastecerse y comercializar sus productos.

Calca

Pueblo inmerso en las bellezas de los paisajes andinos, en un ambiente de paz y tranquilidad, que tienen como fondo las hermosas nevadas de Pitusira y Sahuasiray. Cerca del pueblo se encuentran los baños medicinales de Machacancha (aguas termales sulfurosas) y Minasmoqo (aguas frías y gaseosas). Cerca de Calca se encuentra el complejo arqueológico inca de Huchuy Cusco.

Calca se encuentra a 50 km (31 millas) de Cusco, 2,928 m.s.n.m. (9,606 pies).

Yucay

La belleza de su paisaje y la benignidad de su clima hicieron de Yúcay el lugar elegido por la realeza inca para el descanso y la relajación, que también atribuyó un carácter mitológico y poderes sobre el espíritu humano.

La fertilidad de sus tierras lo convirtió en uno de los principales centros de producción agrícola en la época de los incas, grandes andenerías. Existen numerosas construcciones incas, entre ellas el palacio inca Sayri Túpac, construcción de piedra y adobe con decoraciones en sus paredes en alto y bajo relieve.

En el pueblo hay un pequeño museo de sitio; Hay cómodos y buenos hoteles en la zona. Se encuentra a 68 km (42 millas) de Cusco y 2,857 m.s.n.m. (9,373 pies)

Urubamba

Otra antigua ciudad inca, ubicada en un valle fértil, una vez que fue un gran centro agrícola de los incas, y hoy en día un hermoso campo, con gran producción de fruta.

Urubamba se encuentra en las estribaciones del majestuoso Chicón, al que se puede llegar fácilmente y alcanzar su ascenso.

Urubamba también se conoce como la “Capital Arqueológica del Perú”, debido a los ricos sitios arqueológicos incas que existen en el área; También se la llama “La Perla del Vilcanota”, por los incomparables paisajes que la rodean, escenarios naturales de una belleza indescriptible. Existen comunidades indígenas con marcadas costumbres ancestrales.

Urubamba es también un escenario ideal para la práctica de numerosos deportes de aventura, como piragüismo, senderismo, montañismo, ciclismo de montaña y paseos a caballo. Desde Urubamba, existen buenas rutas de penetración para emprender aventuras en la zona selvática del Cusco.

En la ciudad y sus alrededores, hay lugares cómodos y excelentes para quedarse y comer. Se encuentra a 72 km (45 millas) de Cusco, a través de Písac, y 58 km (36 millas) a través de Chinchero, 2,871 m.s.n.m (9,419 pies).

Ollantaytambo

La leyenda dice que Ollantay (el titán de los Andes) de origen plebeyo, amó a la princesa Cusi Coyllor (estrella alegre) hija del rey Inca Pachacútec, que estaba en desacuerdo con este amor. Pachacútec envió a la princesa a una casa de Virgin, Ollántay trató de secuestrarla desde allí, sin lograrlo y logró huir. Desde la fortaleza que Ollántay tenía al mando se rebeló contra Pachacútec, y luego de que las sangrientas batallas fueron derrotadas, pero la generosidad de Pachacútec hizo que perdonara la vida de Ollantay.

La fundación de Ollantaytambo se atribuye a Ollantay y prevalece la fortaleza militar que protegía esta zona del valle, ubicada estratégicamente entre dos montañas. Hoy en día se puede ver esta fortaleza, así como los ricos yacimientos arqueológicos incas, formados por el templo Inti (dios del sol), el Incamisana, los baños de las Ñustas, las chullpas de Cachiccata, un grupo de terrazas simétricamente escalonadas. Muy empinada en la ladera de una colina.

En la cima del complejo arqueológico destacan seis monolitos de enorme tamaño, ensamblados con una precisión increíble, que han grabado misteriosos motivos de la iconografía inca.

La actual ciudad de Ollantaytambo tiene muchas casas construidas en las bases de la antigua ciudad inca, donde habitan nativos de costumbres ancestrales.

La complejidad y la belleza de los edificios incas y la gente contemporánea, el vasto complejo agrícola, el gran centro administrativo y social, religioso y militar, es considerado por muchos científicos e historiadores como uno de los museos vivos más importantes del mundo.

Ollantaytambo se encuentra a 97 km (60 millas) de Cusco, 2,846 m.s.n.m. (9.337 pies). Estación de tren a Machu Picchu.

Todo el Valle Sagrado de los Incas es también un escenario natural donde, además de apreciar la riqueza arqueológica, es un lugar ideal para disfrutar de su rica flora y fauna, observación de aves silvestres y deportes de aventura.

La diversidad de sus microclimas permite la producción de muchas especies de flores altas, que embellecen sus campos con una amplia variedad de papas, cereales, hortalizas y árboles frutales y plantas ornamentales. En la zona, será común encontrar ciervos, chinchillas, vizcachas, zorros, palomas andinas, e innumerables aves y hermosos colibríes. En el río Vilcanota, puede pescar deliciosos salmones y truchas arco iris, especialmente entre abril y octubre.

Todos los pueblos están conectados por un buen camino, lo que facilita su visita. Suerte.